Nuevo ejército de $400 millones para luchar contra los traficantes de personas y los terroristas enfrenta el momento de la verdad de la ONU
El lunes todas las propuestas que se han establecido para combatir en Libia y Sahel el terrorismo y la trata de persona, serán debatidas buscando su credibilidad cuando la ONU defina el apoyo a una fuerza nueva de seguridad compuesta por 5 naciones sugeridas en toda la región.
400 millones de dólares es el costo de un ejército de 5.000 funcionarios, que están entrenados para combatir al aumento de la inseguridad y poder dar fin al contrabando de personas que a partir del 2014 ha arrojado una suma de alrededor 30.000 muertos en el Sahara y aproximadamente 10.000 ahogados en el Mediterráneo Central.
Fuerte respaldo de Francia e Italia
Francia e Italia han dado un fuerte respaldo a la fuerza del G5, que a partir de la próxima primavera estará activa trabajando en 5 estados del Sahel, aunque muchos piensan que la región del Sahel necesita mejor coordinación que ayude al desarrollo económico, para poder combatir también el otro factor que es la migración.
La administración de UU.EE no comparte las propuestas realizadas por lo cual niega el respaldo de la ONU a la fuerza del G5 Sahel con efectivo. Las personas al frente del comando declaran su necesidad de 423 millones de euros en el primer año, pero a la fecha solo se ha recaudado 108 millones, llegando a la mitad de UE, aunque los británicos no se han manifestado con los fondos ellos dicen que apoyan la propuesta.
Administración escéptica de Trump
Diplomáticos occidentales están a la expectativa de que UU.EE manifieste su aporte en los fondos bilaterales para dicha operación
Antonio Guterres Secretario general de la ONU, apoyado por Francia y por líderes regionales africanos han estado buscando una variedad de recursos diplomáticos para poder persuadir a la administración de Trump de que la ONU debe acompañar financieramente a la fuerza G5. En su intento por lograrlo el secretario general Guterres en un comunicado advirtió este mes al Consejo de Seguridad que “Sahel se encuentra aprisionada por la mala gobernanza política, por la pobreza, por los efectos del cambio climático y también la inseguridad”.
También dijo que en dado caso de que la comunidad internacional no tome medidas contundentes para evitar estos problemas, la estabilidad de la región se verá en un gran peligro y que también dejarían a millones de civiles en riesgo de violencia, de ser así añadió que la comunidad internacional será la responsable de lo que puede acontecer.
La finalidad de todo esto es que la fuerza G5 puede lograr la misión de combatir al terrorismo islámico y los traficantes de personas que operan alrededor de una distancia de 50 km por medio de las líneas fronterizas en Chad, Malí, Burkina Faso, Níger y Mauritania.
Potencias europeas se encuentran muy interesadas en el cambio de la dinámica al norte de África, y es que un alto nivel de migración abruma el sur de Europa, el año en curso la UE ha tratado de llevar el problema de una manera polémica de regreso al norte de África, financiando algunos programas de impulso económico, la repartición de migrantes y por supuesto una mejor seguridad en Libia.
Antigua potencia colonial
The Guardian, asociado con otros cinco periódicos de Europa (Le Monde, La Stampa, El País, Der Spiegel y Politiken) esta semana se han dado la tarea de investigar cómo afecta a los inmigrantes y las rutas de migración en Europa la decisión severa de la UE.
Actualmente Francia llevando la presidencia variable de la ONU, y siendo ella una antigua potencia colonial, designó a su ministro de Asuntos Exteriores Jean Yves Le Drian para que éste dirija la reunión que se dará cita el lunes en Nueva York en señal de su interés a la propuesta y también el apoyo de la ONU.